LOS ENJUAGUES Y COLUTORIOS

La boca dispone de muchos huecos y lugares de difícil acceso a la hora de realizar la higiene oral. Huecos a los que no logra acceder el cepillo de dientes. Es ahí, donde enjuagues y colutorios se convierten en nuestros fieles aliados y nos garantizan una higiene bucodental mucho más completa.

En la cavidad oral se acumulan una gran variedad de gérmenes y bacterias que pueden ayudar a desarrollar una serie de enfermedades si la limpieza no es correcta. Desde caries, pasando por el mal aliento o halitosis, hasta una gingivitis y otras formas de enfermedad periodontal. Son patologías que pueden derivar en pérdida de piezas dentales o en la aparición de infecciones puntuales.

Una buena limpieza bucal evita los problemas anteriormente citados y, para ello, se hace necesario cepillarse los dientes como mínimo dos veces al día y utilizar hilo dental o cepillos interproximales para llegar a los espacios donde el cepillo normal no logra acceder. Para que la higiene oral sea de nota, debemos añadir a nuestro protocolo un colutorio o enjuague adecuado.

La diferencia entre ambos es que el primero es una solución más espesa que se puede aplicar con pincel o espátula sobre afecciones bucales mientras que el segundo es un preparado en solución para usar como limpieza de dientes y boca.

Ahora mismo, el mercado nos plantea una gran variedad de productos. En ALAIA podemos recomendarte el más beneficioso en función de tus necesidades.

Debemos utilizarlo, al menos, una vez al día y después del cepillado.

Un buen uso, logrará más salud para nuestra boca, así como un aliento fresco y cuidado. Nuestros dientes estarán, incluso, más blancos. Lo que debemos tener claro es que, tras un enjuague, no hay que ingerir alimentos ni bebidas de forma inmediata, ya que eliminaríamos su efecto protector. Lo mejor es pautarlo en nuestra rutina de higiene dental nocturna.

Los enjuagues nos ayudan a impedir el desarrollo de caries, reducen el nivel de placa bacteriana, minimizan la formación de sarro (placa bacteriana mineralizada) y también previenen o reducen las enfermedades periodontales. La mayoría de ellos contienen flúor y debemos tener claro que son un magnífico complemento en la higiene de nuestra boca, pero no un sustituto al cepillado y al hilo dental.

Lo ideal es usar estos productos dos veces al día, una de ellas antes de acostarnos, como señalábamos anteriormente. Mantenemos el enjuague en la boca durante medio minuto. En ALAIA recomendamos que no lleven alcohol, ya que puede ser irritante de la mucosa oral. De todos modos, tu dentista te dará la mejor recomendación según sean tus necesidades.

En ALAIA sabemos el colutorio o enjuague que más te interesa. ¡Pregúntanos!